Jul
15
Cómo es la Saturación de Oxigeno
Cómo es la Saturación de Oxigeno.
Se refiere a la medida de la cantidad de oxígeno en la sangre. Mediante el bombeo de sangre que ejecuta el corazón, el oxígeno se une a los glóbulos rojos y son repartidos por todo el cuerpo y cuando los niveles de saturación son óptimos o normales todas las células reciben una cantidad adecuada de oxígeno, para el carbonato de sodio se refiere al porcentaje de eritrocitos completamente saturados. Un nivel de saturación de oxígeno en sangre normal oscila entre un 95% y 100%, sin embargo, en pacientes con padecimientos o trastornos respiratorios estos valores pueden bajar un poco.
¿Cómo se determina el nivel de saturación de oxígeno en sangre?
Para conocer la medida de la cantidad de oxígeno en sangre hace falta un oximetro a pulso que es un pequeño dispositivo que se coloca en el lóbulo de la oreja o de un dedo del paciente y mediante la emisión de un haz de luz rojo y otro infrarrojo lee o escanea pequeños cambios en el color de la sangre causada por el pulso y emite una estimación inmediata de la saturación.
En los casos que se requiera de medidas o lecturas más exactas puede realizarse una gasometría que es una prueba en la que se extrae la muestra de sangre directamente de la arteria y no de una vena; es un examen rápido que no genera dolor en el paciente y cuyos resultados se obtienen en cuestión de minutos.
Bajos niveles de oxigenación y la hipoxemia.
En pacientes con valores de oxigenación por debajo de un 90% se habla de hipoxemia, que es una afección que se produce por falta de oxígeno en las arterias, alterando la respiración y circulación de la sangre. Esto trae como consecuencia, además de la falta de oxígeno en los pulmones para ser transportado a la sangre, la afectación del corazón que comienza a trabajar más lento desencadenando graves dificultades para respirar.
La hipoxemia suele manifestarse a raíz de padecimientos respiratorios y/o coronarios previos, cardiopatías congénitas, embolias, neumotórax, edemas, anemia y enfisema entre otros.
Para prevenir la hipoxemia se sugiere suprimir el consumo de tabacos o cigarrillos y realizar periódicamente ejercicios además de una alimentación balanceada. El desarrollar hábitos saludables, nos ayudará a alcanzar mejores niveles de bienestar; recordando siempre que el sedentarismo es uno de los principales enemigos de nuestra salud.