Jun
16
Elefante Africano de Sabana, un animal en peligro de extinción
La espiral descendente no tiene fin a la vista. La UICN, la Unión Mundial para la Naturaleza, ha actualizado su Lista Roja para incluir unas 37.500 especies animales y vegetales como vulnerables a partir del 25 de marzo de 2021. Se trata de una cifra récord.
¿Qué pasa con el Elefante?
El elefante africano de bosque y el elefante africano de sabana son dos de los grandes perdedores de la actual Lista Roja. Según la investigación, el elefante de bosque, clasificado como especie distinta y examinado de forma independiente por primera vez, está «amenazado de extinción».
Los elefantes de la sabana africana están ahora clasificados como «en peligro crítico». Ambas se consideraban anteriormente dos subespecies del elefante africano, que la UICN clasificaba antes como «en peligro». Las poblaciones de elefantes de los bosques han disminuido más del 86% en los últimos 31 años, mientras que las poblaciones de elefantes más grandes de la sabana han disminuido al menos un 60% durante los últimos 50 años.
Muchos paquidermos han sido cazados furtivamente, sobre todo desde 2008, pero la degradación y fragmentación del hábitat también están causando estragos. Además, cuando los seres humanos siguen adentrándose en los hábitats nativos de los animales, éstos se enfrentan cada vez más a los enormes herbívoros, lo que a menudo provoca muertes de personas y elefantes. Sin embargo, otras poblaciones que se mantienen estables o incluso crecen demuestran que los métodos de conservación integrados a largo plazo también son eficaces.
Elefantes en África
Mientras que el elefante de la sabana se encuentra en varios países del África subsahariana y algunas -pero no todas- de sus poblaciones son estables o incluso están en aumento, el elefante del bosque forma parte de los animales de la selva de África central y occidental.
Actualización de la Lista Roja (julio de 2020):
«Se trata de la mayor extinción masiva desde la desaparición de los dinosaurios«, comenta Christoph Heinrich, Director de Conservación de la Naturaleza de WWF, sobre los nuevos datos. Entre otras razones, el hámster de campo se considera actualmente en peligro crítico a escala mundial. La ballena franca del Atlántico, la ballena franca del norte y muchas especies de lémures son miembros de esta familia. «En el día mundial de las especies, los humanos desempeñamos un doble papel peligroso. Por un lado, estamos destruyendo los hábitats de las especies, contribuyendo así a su extinción.
Por otro lado, la diversidad de especies es necesaria para el funcionamiento de los ecosistemas, que en última instancia dependen de nosotros», señaló Heinrich. «Un mundo natural sano y diverso nos proporciona alimentos, agua limpia y otras materias primas, regula el clima y nos protege contra enfermedades y pandemias. El daño a la naturaleza se produce sobre todo a expensas de miles de millones de personas del Sur global, cuyos medios de vida dependen con frecuencia de la explotación de los recursos naturales.»